
La torre Agbar, de Jean Nouvel, con sus 142 m. de altura, sus 4.500 ventanas, y sus 59.619 lamas de cristal, es un edificio singular y único que pertenece a la llamada "arquitectura bioclimática".
En definitiva, que es un "edificio inteligente".
Tan inteligente es que, harto de la política aldeana relizada por el tripartito, ha salido como un cohete de Barcelona, y nuestra reportera Clara captó el instante para ofrecértelo, con una cámara SONY a380 que tiene estabilizador de imagen en el cuerpo; oséase, Steadyshot. ¡Toma ya!
¿Su destino? Otra ciudad con visión cosmopolita que tenga políticos modernos, a juego con su arquitectura.
En definitiva, que es un "edificio inteligente".
Tan inteligente es que, harto de la política aldeana relizada por el tripartito, ha salido como un cohete de Barcelona, y nuestra reportera Clara captó el instante para ofrecértelo, con una cámara SONY a380 que tiene estabilizador de imagen en el cuerpo; oséase, Steadyshot. ¡Toma ya!
¿Su destino? Otra ciudad con visión cosmopolita que tenga políticos modernos, a juego con su arquitectura.